Tomare tu huída entre mis dedos
la luz te querrá sonreir
volverás del mar
vestida del amanecer esquivo
volarás sobre la tormenta
y te quedarás a cenar.
Borrarás el nombre de las calles
cegarás las estelas desde atràs
volverás por tus mejores prendas
y volarás al primer álito de fuerza,
dejando tu sombra donde una vez
te dejó el mar.
Reunirás conmigo
la piel que desnudaste
y vestiremos de nuevo el cielo
de nubes de jazmin
de versos escritos sobre tu cama
para que canten mientras sueñas.
Abre con tus ojos el alba
y anochece para que hagas las luces bailar,
mueve el viento
mientras que desenredas
las estrellas entre tus cabellos,
solo duerme debajo del cielo
mientras el duerme en tus manos.
Solo te hace falta una sonrisa
para que la palabra se haga verbo
sobre tu piel,
para que tus pasos guien tu promesa
para que escribas promesas entre tus sábanas
con tus dedos.
Descansarás al abrigo de un suspiro
al susurro de la promesa de tu alma,
y en la brisa que despide el sol
deteniendo el pulso de las horas
volverás a alzar tus labios,
para amar.